Hidratar, proteger, nutrir, o equilibrar nuestra piel con productos de belleza como los de Misolo, es importantísimo, pero ¿sabes que otras rutinas pueden hacer que se vea una gran diferencia en tu piel? Una de ellas es....la alimentación.
Nuestra piel es el órgano más grande del cuerpo y es un barrera que actúa como frontera entre nosotros y el exterior, protegiéndolo y ayudando a mantener perfectas sus estructuras. Por ello, una alimentación equilibrada y saludable puede ayudar a que tu piel se vea mucha mejor.
Entre alguno de los datos que más nos han llamado la atención destacamos:
- Una piel seca, puede cambiar su naturaleza con una profunda hidratación, beber mucha agua durante el día, no solo en las comidas, cambiar el café por el Té, y tomar fruta pueden ayudarte a estar mejor hidratada.
- La rosácea -una de las enfermedades crónicas más típicas de la piel- florece en mayor medida con el abuso de sustancias picantes y también el alcohol, puesto que son vasodilatadores que empeorarán los periodos de rubor facial.
- Nada sobre chocolate, café o alcohol, las únicas evidencias científicas acerca del acne y su desarrollo son los lácteos y los alimentos altos en azúcar que si que son perjudiciales.
- Para el envejecimiento, olvida los alimentos quemados, desde el pan tostado hasta la carne con las marcas de la parrilla, esto afecta a los fibroblastos de la piel y afectan el colágeno y la elastina.